martes, 16 de junio de 2009

deseos callados

Se que lo que hacemos está prohibido, más
por ese motivo es tan tentador.
Las cosas que me dices en el oído hacen que
se me erice la piel.
Se muy bien que nadie quiere que hagamos
esto, más tu forma de tocarme y abrazarme
con tus besos, hacen que todo se aclare
a mi alrededor, me ayudas a olvidar cada una
de mis tristezas, me haces recordar de que
aun estoy viva y de que me puedo reír.
Se que jamás amanecerá ya que está noche se
hará eterna entre nosotros dos, la única luz
que habrá será las velas y la de tus ojos.
Al comienzo me quedaré callada y dejaré que hables,
después de un rato te callare besándote la boca y
te diré, que dejes que el momento hable por los dos,
tu pondrás una sonrisa en tu cara y por algún
motivos el silencio se convierta en las palabrasmás hermosas que yo jamás halla escuchando.

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